ENFRENTANDO PRUEBAS
ES FACIL IDENTIFICAR con Job en el capitulo 29 como el habla de su pasado “Como fui en los días de mi juventud, cuando el favor de Dios velaba sobre mi tienda” (v.4) Pero lo que podemos aprender de la vida de Job debería ser que las dificultades y los sufrimientos son inevitables en nuestra vida. Si todavia no has enfrentado pruebas significantes como pareja, eventualmente lo haras.
He aquí lo que aprendimos durante esos tiempos:
Primero, necesitamos usar esos sufrimientos como una oportunidad para acercarnos a Dios. Nada pasa en nuestras vidas que El no haya permitido u ordenado. Como en salmo 23:4 nos dice, “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tu estaras conmigo; Tu vara y tu callado me infundirán aliento.”
Segundo, Necesitamos estar ahí el uno para el otro. Un esposo y una esposa deben estar envueltos entre ambos durante la crisis. Cuando nuestro hijo adolecente, Samuel fue diagnosticado con distrofia muscular, recuerdo que tomo un acto deliberado de mi voluntad para moverme hacia Barbara y el dolor que ella estaba experimentando porque yo no estaba en el mismo lugar donde ella. Yo no estaba tan listo para hablar del tema tanto como ella y ella necesitaba hablar del asunto . Asi que yo tome la iniciativa de conversarlo.
Tercero, necesitamos hacer de nuestro matrimonio una prioridad. Sabemos que si nuestro matrimonio permanece solido, nuestros hijos se sentiran fuertes y mas seguros también.
Cuarto, Aprendimos que necesitamos que el cuerpo de Cristo nos ministre. La manera mas grande como nuestros amigos nos ayudaron durante la situación con Samuel fue escribiendo cartas. Estas cartas realmente amplificaron la perspectiva de Samuel del cuerpo de Cristo. No creo que el tenia idea de que la gente se preocupara por el de la manera que lo hacen.
Finally, aprendimos a mantenernos de la verdad de la palabra de Dios sin importar lo que nuestras emociones nos digan. No podemos negar nuestras emociones, pero no debemos permitir que estas controlen nuestro proceder, tampoco. Te tienes que sostener de la verdad de las escrituras y permitir que ello sea la fundación de nuestro hogar.
Aun que no sintamos que Dios nos ama, sabemos por las Escrituras que El lo hace. Cuando sentimos que nada bueno puede resultar de una prueba o calamidad, sabemos por Romanos 8:28 Y sabemos “que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es , a los que conforme a su propósito son llamados.”
Aunque en la experiencia con Samuel, vimos que nuestro hijo aprendió a confiar en Dios a pesar que no entendía Su plan. Recuerdo que una noche unos meses después del diagnostico, cuando el y yo manejábamos de regreso del mercado. Estabamos hablando de sus limitaciones, y yo le comparti como Dios ha usado a personas sin importar su situación. Mis débiles esfuerzos para confortarlo parecieron superficiales. Un momento de silencio lleno el auto.
Luego Samuel volteo de mirar a través de la ventana y dijo resuelto “Bueno, papa, Creo que no necesitas piernas para servir a Dios.”
Los ojos se me llenaron de lagrimas. Mi hijo me estaba ensenando una lección de confianza. Y mientras manejaba a casa yo ore en silencio, “Senor, aumenta mi fe y usa a mi hijo para tus propósitos.”
NOTA: Este articulo es de el libro Family Life Marriage Bible por Dennis y Barbara Rainey.
NOTA: Un tema nuevo diariamente que ayudara a tu matrimonio a tener éxito.
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